Se preparan estados en EUA para enfrentar el cambio climático

*Comienzan a recibir recursos para prevenir desastres, a pesar de ser negacionistas

 En 2018, el Congreso de los Estados Unidos diseñó un plan con 16 mil millones de dólares para ayudar a los estados devastados por desastres para prepararse ante eventos provocados por el clima extremo, y el presidente Donald Trump lo aprobó, hecho que muchos han interpretado como que el cambio climático comienza a ser tomado en cuenta. 

Es la primera vez que la legislación nacional ha diseñado subvenciones en bloque para ayudar a los estados a prepararse para futuros desastres, en lugar de simplemente reparar los daños.

Los 16 mil millones de dólares de fondos federales pronto serán liberados y más de la mitad irá a Puerto Rico y las Islas Vírgenes; el resto se repartirá entre nueve estados continentales.

Los que obtuvieron la mayor cantidad de dinero para prepararse para el cambio climático apoyaron a Trump en 2016 y están bajo control republicano: Texas recibirá más de cuatro mil millones; Louisiana 1.2 mil millones; Florida 633 millones; Carolina del Norte 168 millones, y Carolina del Sur 158 millones. Missouri, California, Virginia Occidental y Georgia también recibirán fondos.

Al parecer hay una razón por la cual un grupo de estados republicanos aceptaron el dinero para mitigar el cambio climático sin problemas: ninguno tuvo que reconocer la crisis ambiental que se vive para acceder a los fondos.

Cuando el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD, por sus siglas en inglés) solicitó propuestas estatales sobre cómo utilizarían los fondos, no les pidió tomar en cuenta el cambio climático, a pesar de que el dinero se utilizará para proteger a los estados de los efectos del aumento de las temperaturas.

En cambio, pidió a los beneficiarios describir sus “riesgos actuales y futuros basándose en la última ciencia disponible”. HUD ni siquiera usó los términos “calentamiento global” ni “cambio climático” en su solicitud, aunque sí pidió a los estados tomar en consideración el “aumento continuo del nivel del mar”.

Los resultados fueron reveladores: las solicitudes de Florida y Carolina del Norte mencionaron que el cambio climático representa un riesgo importante; Carolina del Sur y Texas ignoraron el tema por completo y usaron frases como “condiciones costeras cambiantes” y “efectos desestabilizadores e imprevisibilidad” de los desastres. Louisiana mencionó el cambio climático una vez en su plan.

Parecería que permitir que los estados esquiven el cambio climático es otra forma en que la administración Trump socava a la ciencia, pero la reticencia de HUD a obligar a los estados a decir que se preparan para el aumento de las temperaturas podría ser algo bueno.

“Todavía hay estados en los que es un pararrayos político reconocer que el cambio climático es responsable de los daños”, dijo Marion McFadden, directora de subvenciones de recuperación ante desastres en HUD durante la administración de Obama.

“HUD se está enfocando en los planes, no en la causa raíz de la necesidad de mitigar”. Ya sea que los estados republicanos acepten o no la realidad del cambio climático, comienzan a prepararse, lo que podría salvar vidas y evitar daños económicos en el futuro.

Independientemente de la postura de HUD sobre el cambio climático, parece que los funcionarios estatales negacionistas pronto podrían ser rechazados por sus electores.

En Texas, los republicanos controlan la casa del estado, el senado y la oficina del gobernador, pero el principal funcionario electo en el condado de Harris, el más poblado, cree que el cambio climático es un problema importante.

“Si tomamos en serio la ruptura del ciclo de inundaciones y recuperación, tenemos que cambiar la forma de cómo hacemos las cosas, y eso significa poner la ciencia por encima de la política”, aseveró la demócrata Lina Hidalgo.