Minerva Hernández olvida legado de corrupción de Anabell Ávalos en la capital


Minerva Hernández Ramos, candidata del PRI a la alcaldía de Tlaxcala, ha mostrado una notable contradicción al solicitar a los ciudadanos votar por un “proyecto de cambio”, ignorando las irregularidades financieras que dejó el gobierno de su aliada Anabell Ávalos Zempoalteca en la capital.


Y es que, durante el último año de su gestión como alcaldesa capitalina, Ávalos acumuló irregularidades por 6.7 millones de pesos en el área de seguridad pública.


Hernández Ramos asegura que la elección en Tlaxcala está reñida entre dos opciones y que su propuesta trae un gobierno innovador, transparente y con “tolerancia cero a la corrupción”.


Sin embargo, una revisión de los fondos federales del 2021 por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) reveló que el Municipio de Tlaxcala no gestionó los recursos de manera eficiente ni transparente, incumpliendo la normativa del Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios (FORTAMUNDF).


En otras palabras, gobierno de Anabell Ávalos, ahora aspirante al Senado por la alianza PRIAN, no cumplió con la ley y acumuló observaciones financieras significativas.


La auditoría detectó falta de documentación justificativa y comprobatoria del gasto, obras sin expedientes técnicos, y adjudicaciones que excedieron los montos autorizados, provocando un daño probable a la Hacienda Pública Federal de 6.7 millones de pesos.


A pesar de estos antecedentes, ambas políticas buscan el voto popular prometiendo un cambio, a pesar de que su historial no refleja honestidad ni eficiencia.