Arturo MARTÍNEZ
En un mensaje contundente y sin rodeos, la dirigencia estatal del PRI en Tlaxcala acusó a los gobiernos emanados de Morena tanto el federal como el estatal de abandonar por completo al sector primario, provocando con su inacción los bloqueos carreteros y las protestas que en los últimos días paralizaron al estado.
Durante una conferencia de prensa este martes, Enrique Padilla Sánchez, presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, señaló que las recientes manifestaciones de agricultores y transportistas son consecuencia directa de un gobierno de “oídos sordos”, incapaz de atender demandas básicas y urgentes de quienes sostienen la economía rural.
Padilla Sánchez aprovechó también para desmentir señalamientos difundidos en redes sociales que acusan al PRI de financiar o promover las movilizaciones.
“Es falso, absolutamente falso. El descontento lo generó Morena, no nosotros. El PRI no organiza ni paga bloqueos; los provoca la insensibilidad de un gobierno que se niega a escuchar”, afirmó.
Acompañado de integrantes de su dirigencia, el líder priista recordó que el campo mexicano fue durante décadas un sector apoyado con subsidios, programas de impulso y acompañamiento técnico, todos ellos eliminados o reducidos al mínimo desde la llegada de la autodenominada Cuarta Transformación.
“Morena desapareció los apoyos que mantenían vivo al campo. Hoy exigen productividad sin dar herramientas, piden resultados sin dar recursos. Así no se puede”, señaló.
El PRI exigió que los gobiernos encabezados por Claudia Sheinbaum Pardo y Lorena Cuéllar Cisneros dejen de recurrir a “mesas de trabajo simuladas y reuniones meramente protocolarias”, y atiendan de manera real, técnica y con soluciones concretas las necesidades del sector campesino, cuya presión social se ha hecho sentir en todo el estado.
“Si el campo protesta es porque ya no tiene margen para aguantar más. Tlaxcala necesita respuestas, no discursos”, remató Padilla Sánchez.