Encuentran cinco cuerpos en un cañón de Emiliano Zapata, Veracruz

Cinco cadáveres, hallados en el fondo de un cañón, fueron rescatados por autoridades de Veracruz en el municipio de Emiliano Zapata; así lo dio a conocer la Fiscalía General del Estado (FGE) en un comunicado. 

En el boletín informativo, la FGE detalló que el hallazgo fue producto de una llamada anónima que recibió la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de la entidad, alertando sobre olores fétidos en el poblado de Cerro Gordo, del municipio Emiliano Zapata

Peritos adscritos a la Fiscalía de Veracruz acudieron al llamado de la SSP, en compañía del Escuadrón Nacional de Rescate y de brigadistas de Protección Civil. 

Al realizarse los trabajos de búsqueda, se encontraron los cinco cuerpos aún sin identificar, en estado de putrefacción, razón por la cual se inició la carpeta de investigación UIPJ/DXI/F9/7681/2019 para determinar las causas de la muerte y la identificación de los cadáveres

Los trabajos de búsqueda por parte de peritos y policías ministeriales de Veracruz continúan, por si hubiese la posibilidad de encontrar más cuerpos en el fondo de dicho cañón. 

Los antecedentes de este hallazgo de cadáveres en Emiliano Zapata

En esa misma zona la zona de Emiliano Zapata, en 2016 fueron hallados 19 cadáveres

Las investigaciones derivadas del hallazgo de los 19 cuerpos derivaron en el encarcelamiento de 40 funcionarios de la policía estatal, acusados de desaparición forzada.

Esos crímenes están enmarcados en una ola de violencia que se exacerbó cuando se militarizó la estrategia contra las drogas en 2006. Desde entonces, más de 250 mil personas han sido asesinadas, incluido un récord de 33 mil 753 el año pasado.

Veracruz ha sido una de las regiones más afectadas, pues actualmente enfrenta una crisis de violencia derivada de la expansión del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), en la disputa por puntos de robo de gasolina, secuestro y trasiego de droga. 

Desde 2006 se han encontrado más de tres mil fosas clandestinas en Veracruz -una forma habitual de los narcotraficantes o agentes de seguridad corruptos de deshacerse de sus víctimas- con casi 5 mil cuerpos, pero gran parte de ellos no han sido identificados, según datos oficiales.