CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Poco más de un año después de que el avión presidencial TP01 Boeing 787-8 “José María Morelos y Pavón” fue enviado a Estados Unidos para su venta, este regresará a México con dos destinos posibles: venderlo o rentarlo por hora.
El anuncio se hizo en la conferencia de prensa presidencial, en Palacio Nacional. Ahí, el director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), Jorge Mendoza Sánchez, recordó que para intentar la venta se contó con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Y explicó que, pese a que se identificaron 42 posibles compradores, de los cuales 12 expresaron interés por comprarlo y solo seis presentaron oferta –dos de ellos por encima del avalúo—ninguna se concretó.
Por ello, luego de permanecer desde el 3 de diciembre en, Victorville, California, donde recibía mantenimiento, regresará a México en los próximos días, luego de que reciba un último mantenimiento.
A su regreso permanecerá en el Hangar presidencial o en Santa Lucía y se entregará a la Fuerza Aérea para su resguardo y exhibición.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) será la encargada del mantenimiento de la ostentosa aeronave adquirida por Felipe Calderón en la recta final de su gobierno. Enrique Peña Nietofue quien le dio uso.
Costo, devaluación y mantenimiento
El director de Banobras recordó que ese banco compró el avión presidencial en 2012, que lo arrendó al gobierno federal, a través de la Sedena y Hacienda y que el costo de la operación fue de 218 millones de dólares.
De acuerdo con el funcionario, el avalúo actual del avión es de 130 millones de dólares.
“Vamos a relanzar el esfuerzo (de vender el avión) y el gobierno mexicano ha decidido regresar a territorio mexicano para su resguardo, buscaremos otras alternativas de comercialización” dijo Mendoza Sánchez.