El presidente Andrés Manuel López Obrador planteó una tregua en el tema de los contratos de gasoductos, con el propósito de lograr un acuerdo y evitar la vía legal o acudir a tribunales internacionales como está establecido en los convenios.
“Es mejor llegar a un acuerdo que irnos a un pleito que nos puede llevar mucho tiempo; si no hay acuerdo queda la vía legal, podemos continuar con lo que ya se inició, ya hay medidas cautelares de las dos partes, de empresas y gobierno”, refirió en su conferencia de prensa matutina.
En Palacio Nacional indicó que en este tema intervino el sector privado, que en su reunión de ayer le propuso participar para tratar de encontrar un acuerdo entre ambas partes, con lo que se establece una mesa de diálogo, “llegamos al acuerdo de que se abren negociaciones”, apuntó.
Señaló que en las negociaciones participarán los titulares de los consejos Coordinador Empresarial (CCE) y Mexicano de Negocios (CMN) como observadores; un representante de todas las empresas, el director de la CFE, Manuel Bartlet, y por la Presidencia de la Repúlica, el secretario particular, Alejandro Esquer, también como observador.
López Obrador precisó que los contratos implican un monto de cerca de 80 mil millones de dólares y expuso si se aceptan como están originalmente suscritos, “implicaría pagar tarifas muy altas”.
Explicó que ese gas sería utilizado para la generación de energía, lo que implicaría aumentar los costos del suministro, “por ello, no es cualquier asunto, yo espero que se llegue a un acuerdo para que se resuelva este asunto”.
Comentó que se solicitó la intervención de los Tribunales porque también hubo denuncia de parte de las empresas; “entonces, mi propuesta es que haya una especie de tregua en el proceso judicial sin que nadie pierda sus derechos para que se busque un acuerdo. Si no hay ese acuerdo entonces, se continúa con el proceso legal”, anotó.
A pregunta expresa, el Ejecutivo federal aseveró que “si hay denuncias y se confirman (denuncias contra presuntos implicados), se tiene que castigar a los responsables”.
El mandatario federal celebró el periodismo de investigación que se realiza cuando se comete una arbitrariedad o se presume que hay un hecho de corrupción, porque ello permite contribuir a que las cosas mejoren en el país, y no aquél que sigue la máxima de “obedecer o callar”.
La víspera, López Obrador se reunió con los presidentes del CCE, Carlos Salazar Lomelín, y CMN, Antonio de Valle Perochena, quienes anunciaron que se instalaría una mesa de conciliación con las empresas que tienen gasoductos en México Infraestructura Energética Nova (IEnova), TransCanadá y Carso Energy.
A su vez, la Comisión Federal de Electricidad inició los arbitrajes a los contratos que fueron firmados en la pasada administración con esas empresas, las cuales construyeron siete ductos actualmente se mantienen parados. La Comisión Reguladora de Energía (CRE) determinó que la CFE les debía pagar subsidios