Un riesgo latente y evitable pone en jaque la seguridad de los niños en La Magdalena, Tlaxcala, mientras las autoridades municipales y estatales son acusadas de evadir su responsabilidad.
La indignación ciudadana crece ante la amenaza que representan los árboles en peligro de caer, ubicados justo al lado del Centro Regional de Desarrollo Infantil y Estimulación Temprana (CEREDI) y la Comisaría Municipal, en la colonia Centro.
Los vecinos se preguntan ¿qué espera el gobierno para actuar? antes de que ocurra una tragedia.
Los reportes ciudadanos, realizados con el objetivo de prevenir un daño estructural o, peor aún, una afectación a los niños de 0 a 6 años que utilizan el CEREDI, han sido sistemáticamente ignorados.
Los residentes han recibido únicamente promesas, una táctica que, según un habitante, es habitual, pues incluso ramas caídas previamente no fueron atendidas por personal oficial.
La comunidad está cansada de la falta de compromiso y exige enfáticamente a las administraciones municipal y estatal que muestren la seriedad y prontitud que el riesgo requiere, movilizando de inmediato los recursos necesarios para asegurar o remover los árboles y así terminar con esta amenaza que pende sobre la vida de los más pequeños.
