Dra. Elsa Martínez Flores
Instagram y WhatsApp en Código Rojo: El Juicio
Actualmente, Mark Zuckerberg enfrenta un juicio antimonopolio en Washington, impulsado por la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos (FTC) y fiscales que representan a más de 40 estados.
La acusación sostiene que el dueño de empresa Meta adquirió Instagram y WhatsApp para neutralizar a posibles competidores, en lo que se conoce como killer acquisitions o adquisiciones asesinas.
Aunque la demanda fue presentada en diciembre de 2020, la recopilación de pruebas tales como correos electrónicos que fueron obtenidos por vía legal, tomaron varios años.
En dichos mensajes, Zuckerberg expresaba su preocupación con otros directivos por el crecimiento de Instagram y reconocía que WhatsApp superaba a Messenger de Facebook en funcionalidad y alcance.
La etapa de testimonios concluyó a finales de mayo de este año, y se espera que el fallo judicial se emita antes de que finalice 2025, aunque no se descarta una apelación de parte de Zuckerberg si el resultado no le favorece.
Si es declarado culpable, el proceso podría extenderse hasta 2027, ya que Zuckerberg apelaría argumentando que Meta mejoró dichas plataformas, sin intención de frenar la competencia.
Aunque el ecosistema de Meta se consolidó con estas adquisiciones, ahora deberá convencer al jurado de que no conforma una estructura monopólica ni atenta contra la libre competencia.
En medio del juicio, algunos extrabajadores han cuestionado a Zuckerberg por su obsesión con la expansión, control y dinero que generan sus redes sociales bajo el argumento de “acercar a la gente”.
Si pierde el juicio, el dueño de Meta podría verse obligado a vender Instagram y WhatsApp y desmantelar parte de su imperio digital para abrir paso a nuevos dueños con diferentes reglas del juego.
Se avizoraría un cambio radical en el control de datos de millones de usuarios, quienes representan la principal fuente en ganancias en el capitalismo de vigilancia.