Carolina Fung Feng es una de los más de 600 mil “dreamers” que esperan con incertidumbre un proceso en la Corte Suprema de Estados Unidos, que a partir de este martes analizará la decisión del presidente Donald Trump de terminar con un programa que los protege de la deportación.
Al igual que otros “dreamers” o “soñadores”, Carolina llegó a Estados Unidos siendo niña y está en un limbo jurídico desde que el presidente Trump eliminara en 2017 el programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) que les permite trabajar, estudiar, conducir, y evita su deportación a países que muchos de ellos no recuerdan.
Llegada a Estados Unidos cuando tenía 12 años desde Costa Rica, Carolina es parte en la demanda que llegó a la Corte Suprema y que permite que el programa DACA siga vigente provisoriamente.
Este martes la joven entrará al tribunal, donde nueve jueces decidirán su destino. De ellos cinco son conservadores, dos de ellos nombrados por Trump.
“Yo espero que los jueces escuchen nuestro caso y entiendan que somos humanos, que tenemos casas, familias”, Carolina Fung Feng.
Cuando en 2012 el gobierno de Barack Obama anunció la creación del DACA para proteger de la deportación a cerca de más 600 mil jóvenes llegados a Estados Unidos sin papeles cuando eran niños, la mayoría sintió gran alivio, y que ahora, con Trump se ha convertido en incertidumbre.
El plan estaba pensado como un arreglo temporal para darle tiempo al Congreso a legislar. Pero los representantes nunca llegaron a un acuerdo y en 2017 Trump canceló el programa, dejando a miles de “dreamers” en la incertidumbre.
Para Carolina, formar parte de la demanda que analizará la Corte Suprema, cuyo resultado no se espera antes de 2020, en plena campaña electoral en Estados Unidos, significa ser la voz de otros jóvenes como ella y también de los cerca de 10.5 millones de indocumentados que viven en el país.
La mayoría de los “dreamers” es de origen mexicano
Según los datos del Servicio de Ciudadanía y de Inmigración (USCIS), hay registrados 660 mil beneficiarios del DACA, de los cuales el 80% son de origen mexicano, pero también hay jóvenes arribados de El Salvador, Guatemala, Honduras, Perú, Corea del Sur y Brasil, entre otros.