Hay una práctica entre algunas jóvenes muy preocupante para
que sus padres no detecten que consumieron alcohol; recurren a un método
inaudito, conocido como “Tampones en las Rocas”.
“La verdad si te sientes pues borracha, si sientes el efecto
del alcohol nada más la diferencia es que no das como el olor a otras personas.
Lo hacíamos más que nada porque era en el tiempo en que nuestras mamás no nos
dejaban salir. No queríamos llegar a nuestras casas con el aliento a alcohol”.
Monserrat, como otros adolescentes, participó en la práctica
llamada “Slimming”, “Tampodka” o “Tampones en las Rocas”, que comenzó en Europa
como un reto en redes sociales y se registró por primera vez en México en 2013.
Consiste en remojar tampones en vodka e introducirlos al
cuerpo vía rectal o vaginal.
“Duele muchísimo, es como cuando tú te cortas y te pones en
la herida alcohol, es así como que no lo puedes soportar, no usábamos nada para
que se nos quitara el ardor, ya después de cierto tiempo se nos quita”, indicó
Montserrat.
“El mecanismo de absorción por este tipo de tejidos que
tenemos en estas áreas pues es mucho más rápido, lo cual da un cuadro de
intoxicación igualmente más rápido”, explicó Ricardo Nanni, director nacional
de tratamiento y rehabilitación Centro de Integración Juvenil.
Después de 6 o 7 veces, Monserrat sintió miedo y decidió
dejarlo. Había notado cambios en su cuerpo.
“Yo ya empezaba a tener otros efectos en mi cuerpo, de que
mi menstruación ya no era regular”, reveló Montserrat, una habitante de
Michoacán.
En 2018, 345 pacientes fueron atendidos en los centros de
integración juvenil del país por consumo de alcohol vía mucosas, 131 de ellos en
la Ciudad de México. Especialistas advierten de las consecuencias, sobre todo
para las mujeres.
“Dentro de las infecciones más importantes y más graves que
tenemos es el choque tóxico. Es equivalente al picor que deja el irritante del
chile es lo mismo, pero en la zona de la vagina, puede lacerar la vagina y
producir hemorragias y además de los fenómenos inflamatorios en la zona por el
alcohol, porque el alcohol es abrasivo. Todos los fenómenos infecciosos nos
llevan a enfermedad pélvica inflamatoria que puede ocasionarnos infertilidad en
un futuro”, explicó la ginecóloga María Teresa Solano.