Demian MÁRQUEZ
El conflicto entre transportistas y autoridades estatales en Tlaxcala escala nuevamente, luego que Indalecio Saucedo Sánchez, líder de la Coordinadora Estatal del Transporte, advirtió que, si el gobierno no instala una mesa de diálogo antes del 11 de agosto, iniciarán bloqueos viales en los accesos a la capital.
La exigencia es clara: atender el pliego petitorio con nueve demandas que, aseguran, lleva más de seis meses sin respuesta.
Entre los reclamos destacan el alto cobro de trámites por parte de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT), la omisión en los operativos contra mototaxis a quienes consideran competencia desleal, y la permanencia de funcionarios que, según acusan, no han dado resultados.
La falta de regulación en rutas invadidas, sobre todo en la carretera federal Puebla-Tlaxcala, agrava aún más la inconformidad.
Los transportistas ya han realizado movilizaciones masivas, como la del pasado 7 de mayo, con cerca de 600 unidades.
Aunque reconocen que la gobernadora Lorena Cuéllar ha promovido apoyos para renovar unidades, señalan que el resto del aparato gubernamental ha incumplido los acuerdos establecidos desde el inicio de la administración, generando un clima de creciente tensión en el sector.