La esposa del príncipe Enrique, Meghan Markle, dejó el Reino Unido y regresó a Canadá tras la decisión de la pareja de abandonar sus funciones reales, que empujó a la reina a reunir a las cuatro familias de la monarquía británica en busca de “soluciones”.
“La duquesa está en Canadá”, dijo una portavoz de los duques de Sussex sin precisar cuando salió Meghan del país o dónde se encuentra su esposo.
Sacudiendo a la monarquía británica y sorprendiendo incluso a Isabel II, Enrique, de 35 años, hijo menor del príncipe Carlos, heredero al trono, y Meghan, una exactriz estadounidense de 38 años, anunciaron el miércoles que abandonan sus puestos como miembros de primer rango de la familia real pese a seguir “apoyando” a la reina.
Tras meses expresando su incomodidad con la presión mediática, los duques cortaron así su relación oficial con la prensa y afirmaron querer asumir “independencia financiera” y repartir su tiempo entre el Reino Unido y Norteamérica.
En lugar de pasar las Navidades con la monarca en su casa de campo en el este de Inglaterra, la pareja había viajado con su hijo Archie, de ocho meses, a Canadá, donde la californiana Meghan vivió cuando trabajaba en la serie televisiva “Suits”.
Y reaparecieron públicamente en Londres el lunes para una visita a la Casa de Canadá, su última aparición pública antes de su chocante anuncio.
Crisis familiar en la familia real
“La reina convoca una reunión de crisis familiar“, titulaba el viernes en portada el diario conservador The Daily Telegraph.
Citando a una fuente del Palacio de Buckingham, varios medios británicos afirmaron que Isabel II pidió a su equipo, así como a los del príncipe Carlos y a los de sus dos nietos, Enrique y Guillermo, que trabajen “a un ritmo constante” para encontrar “soluciones viables” para implementar la decisión de los duques de Sussex.
La salida de Enrique y Meghan del primer rango de la familia real es cuestión de “días, no semanas”, dijo dicha fuente.