Dan Un Año De Cárcel A Sujeto Que Tiró A Su Perrita A La Basura

NEW YORK - JULY 12: Max, a red nose pitbull cools himself in the Columbus Circle fountain during a heat wave on July 12, 2011 in New York City. The National Weather Service has issued a heat advisory as the heat index is expected to reach 100 in New York City. The city has kept cooling centers open to help residents beat the heat and humidity. (Photo by Ramin Talaie/Getty Images)

Un sujeto de 29 años de edad fue condenado a un año de cárcel por maltrato animal, después de que tiró a su perrita a la basura.

La perrita, de nombre Margarita, estaba a punto de ser triturada por el camión de basura cuando los vecinos escucharon sus quejidos y la rescataron.

Hace menos de un mes, la perrita fue llamada a presentarse como testigo en el juicio contra su dueño por maltrato animal.

Fue una decisión histórica que la perrita se presentara al juicio. La fiscal de Medio Ambiente aclaró a los asistentes que obviamente la testigo no podía hablar, pero que declararían por ella tanto la acusación pública como un médico forense, que explicaron las lesiones que había sufrido el animal y cómo se encuentra actualmente.

Este lunes, el periódico español El País informó que el sujeto fue condenado a un año de prisión “por ‘la acción malvada’ que supone ‘introducir a la perra en una maleta’ abocándola a la muerte, ‘cerrando la cremallera impidiéndole el respirar’ y ‘de forma indigna’ tirarla a un contenedor”.

Para la juez Sandra Barrera Vinent, quien reconoció la actuación ciudadana por rescatar y cuidar a Milagros, “es importante visibilizar este maltrato” y dictar sentencias que trasladen a los ciudadanos más empatía por los animales y que generen “biofilia”.

En la sentencia, se constata la realidad científica de que los animales son seres sensibles y que su maltrato vulnera “las obligaciones biológicas-bioéticas” que con ellos tienen los seres humanos. “Hemos de ser intransigentes con este tipo de hechos” y el Estado debe proteger a los animales de estos actos, señaló la juez y dijo que existe “cierto sadismo” en la conducta del acusado, porque el camión de la basura hubiera “despedazado” viva a la perra.