De acuerdo con la iniciativa de Ley de la Guardia Nacional
presentada por el Ejecutivo al Senado de la República, los elementos de la
Guardia Nacional que se alíen con el crimen organizado serán castigados con
hasta 60 años de cárcel.
La iniciativa presidencial también especifica que esa misma
penalidad se aplicará a mandos o personal de tropa que incumplan su obligación
de actuar contra el crimen organizado y sus integrantes, obstaculicen acciones
contra esos grupos o faciliten o protejan la fuga de los criminales.
Se aplicará la misma pena a elementos que proporcionen
información a cualquier miembro de la delincuencia o asociación delictuosa que
haya podido conseguir o acceder a través de su cargo.
“El régimen disciplinario de la Guardia Nacional busca hacer
servidores públicos honestos, con altos valores cívicos y de servicio, diestros
en el manejo de las armas y el uso de tecnologías, expertos en investigación
científica, dignamente remunerados por el erario y capaces de resistir y
combatir los factores que en el pasado han medrado en otros cuerpos de policía
en el país.” se señala en la exposición de motivos de la iniciativa
presidencial.
En este sentido, se plantea que los integrantes de la
Guardia Nacional tengan un régimen de comportamiento y disciplinario muy
similar al militar, siempre con mando civil. Se plantea que el comportamiento
de sus integrantes represente también un ejemplo para la ciudadanía, por lo que
se castigará cualquier acto que lo corrompa.
Con base en eso, la legislación propuesta contempla un
capítulo denominado “De los delitos contra la disciplina“, en el cual se
enumeran faltas como extravío de un arma, con una pena de 1 a 3 años;
insubordinación ante un superior, entre otros.
La iniciativa presidencial plantea corregir las causas de
debilitamiento de las policías ya existentes, de esta manera, la tipificación
de las faltas en el comportamiento fomentará el fortalecimiento estructural de
los elementos pertenecientes a la Guardia. Es por esto que además de recibir
formación en Planteles militares, los elementos recibirán un estricto control
de comportamiento.
“Se busca facilitar el mando vertical del personal, pero
también la acción horizontal, de solidaridad y colaboración entre iguales.” se
señala en el proyecto de Ley.