Un iceberg de 315 mil millones de toneladas y oficialmente llamado D-28 se desprendió de la plataforma de hielo Amery, en la Antártida Oriental, como parte de un evento normal sin ninguna relación con el cambio climático.
La División Antártica, del departamento de Ambiente y Energía del gobierno de Australia dio a conocer este martes el desprendimiento del gigante iceberg, confirmando así el anuncio hecho horas antes por Copérnico, el programa de observación de la Tierra.
El iceberg, de mil 636 kilómetros cuadrados, o aproximadamente 50×30 kilómetros, se separó la semana pasada, el 26 de setiembre, y de acuerdo con científicos estaba siendo observado como el “diente flojo, ya que parecía estar precariamente unido, señaló la División en un comunicado.
Los científicos que lo observaban pertenecen al Programa Antártico Australiano, el Instituto de Estudios Marinos y Antárticos y el Instituto de Oceanografía Scripps, que monitorean de cerca el sistema de grietas desde hace unos 20 años y captaron la separación del D-28 en imágenes de satélite.