Una pareja de ha sido acusada este lunes en California de
obligar a una mujer guatemalteca y a sus dos hijas menores de edad a trabajar
durante largas jornadas y sin días de descanso en un restaurante mexicano y en
una empresa de limpieza a cambio de poco o ningún sueldo, según afirmaron
fiscales federales.
La pareja, quienes son guatemaltecos naturalizados, ha sido
detenida por cargos de asociación delictiva, trabajos forzados y dar albergue a
migrantes con fines de lucro. Enfrentan una condena máxima de 20 años en
prisión. Se trata de Nery Martínez Vásquez y Maura Martínez, ambos de 50 años
de edad y residentes de Shasta Lake, a unos 270 kilómetros (170 millas) al
norte de Sacramento.
La mujer migrante y su hija mayor fueron obligadas a
trabajar jornadas de 12 horas los siete días de la semana a cambio de un “pago
miserable, muy por debajo del salario mínimo”, mientras que la hija menor lo
hacía sin recibir ni un dólar.
Según la fiscalía, la pareja llevó a la mujer y a sus hijas
a Estados Unidos en 2016 utilizando visas de visitantes temporales. Una vez
expiraron los permisos, los acusados albergaron a las migrantes y las
impusieron una deuda falsa de 12,000 dólares para no ser deportadas a
Guatemala.
La pareja operaba un restaurante llamado Latino’s y una
empresa de limpieza y lavado de alfombras, Redding Carpet Cleaning &
Janitorial Services, según la acusación formal.
Los sospechosos prometieron a la mujer “una vida más cómoda
para su familia, incluyendo un salario justo y oportunidades de educación para
sus hijas”, alega la fiscalía.
Aparentemente, los acusados también separaron a la madre de
sus hijas, las amenazaron con ser arrestadas y las sometieron a maltrato
físico, psicológico y verbal. Las jóvenes fueron golpeadas con un palo.