A los 114 años murió Gustav Gerneth, el hombre más viejo del mundo. El alemán era reconocido como tal luego de la muerte del japonés Masazo Nonaka, quien era más grande que él por solo tres meses.
- Gustav Gerneth murió la noche del lunes mientras se encontraba en su casa de Havelberg, Alemania.
El hombre más viejo del mundo acababa de cumplir años
Unas semanas antes de que se reportara el fallecimiento del hombre más viejo del mundo, éste festejó su cumpleaños 114 rodeado de familiares y amigos.
¿Quién era Gustav Gerneth, el hombre más viejo del mundo?
El hombre nació el 15 de octubre de 1905 en Szczecin, lo que es hoy una ciudad polaca, aunque en ese entonces todavía era alemana.
Gustav fue sobreviviente a la primera y segunda guerra mundial. Sin embargo, en el segundo movimiento mundial armado fue hecho prisionero, cautiverio del que logró salir con vida.
Fue maquinista de profesión y trabajó en la central de gas de la comunidad donde finalmente murió. En 1972 se jubiló; ese mismo año cerró la central gasera.
Las pérdidas del hombre más viejo del mundo
Con tantos años de vida, es casi lógico pensar que tuvo que decir adiós a familiares, como a su esposa, con quien contrajo nupcias en 1930 y tuvo que superar su partida 1988.
Además, el alemán tuvo que sepultar a los tres hijos que tuvo con su esposa y a una nieta, según reportaron medios locales.
El hombre más viejo del mundo tenía ilusión de llegar a 115
De acuerdo con el alcalde de la localidad alemana, Bernd Poloski, el hombre tenía intención de festejar su cumpleaños 115.
El mandatario local estuvo presente en la última celebración de cumpleaños y se dijo contento de haberlo felicitado.
“Estoy contento de haber tenido el gran privilegio de haberle podido felicitar personalmente por su 114 cumpleaños y me alegro de haberle visto de tan buen humor en su día”, Bernd Poloski.
La receta del hombre más viejo del mundo
El secreto que tenía Gustav Gerneth para la longevidad la compartió cuando cumplió 100 años y era muy sencilla: moverse.
El hombre que alcanzó a cumplir 114 años afirmaba que no hay que permanecer estáticos.
“No hay que sentarse sobre el trasero, eso te deja rígido”, Gustav Gerneth
Además, le daba mucha importancia a una buena mantequilla.