Soldado de EU revela cómo se vivió el ataque de Irán a la base iraquí

Durante el bombardeo de Irán  la base iraquí con tropas de Estados Unidos, el miedo se apoderó, por horas, de los soldados, aun de aquellos con más experiencia en campo, como el teniente coronel Tim Garland.

En una entrevista concedida a la agencia internacional Agence France-Presse (AFP) el integrante de la milicia estadounidense recuerda aquel 8 de enero como un hecho “sin precedente”, en donde los muros temblaban bajo el impacto de los misiles lanzados por Irán.

Aunque reconoció que el ataque a la base aérea de Ain al-Asad (oeste de Irak) fue advertido “con unas horas de anticipación”, el teniente coronel se dijo escéptico sobre la posibilidad de que Irán pudiera y quisiera llevar a cabo un ataque tan temerario como ése.

Cerca de las 11 de la noche, hora local, las fuerzas armadas de Estados Unidos y de la coalición abandonaros sus dormitorios para refugiarse en los bunkers fortificados mientras esperaban el embate iraní.

Por más de dos horas, la tensión e incertidumbre se respiraba entre los soldados que esperaban la respuesta por el asesinato del poderoso general iraní Qasem Soleimani, en un ataque estadounidense cerca del aeropuerto de Bagdad el 3 de enero.

Pasada la una de la mañana (hora local) cayó la primera ráfaga del primer ataque de Irán.

Cuando la primera salva (de misiles) cayó, fue el ruido más estruendoso jamás escuchado”, Tim Garland, teniente coronel de Estados Unidos.

Durante tres horas, unas cinco series de ataques de misiles balísticos impactaron la base a intervalos regulares.

No había tenido tanto miedo desde hacía tiempo. No sabíamos cómo terminaría, si se iba a convertir eso en un tapiz de bombas”, Tim Garland, teniente coronel de Estados Unidos.

Cerca de las 4 de la mañana, y tras el paso del violento ataque, los militares salieron de los bunkers para descubrir múltiples incendios y más de diez lugares con impactos.

Uno de los dormitorios de los soldados quedó pulverizado causando pérdidas de todos los efectos personales: prendas, libros, fotos de sus familias y mensajes que guardaban con cuidado en cada destino militar.