El papa Francisco reza por los migrantes fallecidos; lamenta
muerte de padre e hija ahogados en el Río Bravo
El papa Francisco quedó profundamente apenado tras ver la
foto de un padre y su hija de casi dos años muertos ahogados en el Río Bravo y
reza por ellos y todos los migrantes que han perdido la vida intentando escapar
de la guerra y la miseria.
El Santo Padre ha visto, con inmensa tristeza, la imagen del
padre y de su hija muertos ahogados en el Río Grande (Río Bravo) mientras
trataban de pasar la frontera entre México y los Estados Unidos. El papa está
profundamente apenado por sus muertes, reza por ellos y por todos los migrantes
que han perdido la vida tratando de escapar de la guerra y la miseria”,
comunicó el Vaticano en una nota.
La imagen que ha dado la vuelta al mundo muestra a Óscar
Alberto Martínez Ramírez, de 25 años, y su hija Valeria, de un año y 11 meses,
ahogados en una de las orillas del río Bravo cerca de la ciudad mexicana de
Matamoros.
La familia procedía de El Salvador y la madre y esposa de
los fallecidos, Tania Vanessa Ávalos, explicó a las autoridades que el agua se
llevó primero a la niña y fue su padre quien salió en su ayuda, pero ambos
fueron llevados por la corriente del río y desaparecieron.
Hoy, tras la audiencia general de los miércoles, el papa
agradeció a los mexicanos por ser tan “acogedores” con los migrantes, durante
el saludo a los fieles en español en la plaza de San Pedro.
Como es habitual, Francisco saludó a los grupos de fieles
procedentes de España y Latinoamérica y entre ellos al grupo de peregrinos de
Tlalnepantla, acompañados de su arzobispo, José Antonio Fernández Hurtado, y
pidió entonces al Espíritu Santo “para que nuestras comunidades sean acogedoras
y solidarias, viviendo la liturgia como encuentro con Dios y con los hermanos”.
Y entonces dirigiéndose a los fieles mexicanos dijo: “Yo
quiero felicitar a los mexicanos porque son tan acogedores con los migrantes.
Que Dios se lo pague”.
El 13 de junio, el papa Francisco denunció que millones de
migrantes son “víctimas de intereses ocultos” e “instrumentalizados con fines
políticos”, en su mensaje publicado este jueves con ocasión de la tercera
jornada que dedica la Iglesia católica a los pobres.
En este mensaje, el papa aseguró que “pasan los siglos, pero
la condición de ricos y pobres se mantiene inalterada, como si la experiencia
de la historia no nos hubiera enseñado nada” y que en las calles de nuestras
ciudades crece “el ingente número de pobres que carecen de lo necesario y que
en ocasiones son además maltratados y explotados”.
El papa citó entonces a “los millones de migrantes víctimas
de intereses ocultos, tan a menudo instrumentalizados con fines políticos, a
los que se les niega la solidaridad y la igualdad”.