La alta comisionada de Derechos Humanos de Naciones Unidas,
Michelle Bachelet, dejará en Venezuela a dos delegados para que hagan un
seguimiento a la crisis humanitaria en el país petrolero, dijo este viernes el
líder opositor Juan Guaidó.
Bachelet, quien llegó el miércoles a Venezuela en una visita
hasta el viernes, no hizo declaraciones tras su encuentro con Guaidó ni tampoco
el jueves después de reunirse con representantes del gobierno del presidente
Nicolás Maduro.
La alta comisionada, que fue dos veces presidenta de Chile,
tiene previsto reunirse más tarde con Maduro y ofrecer una conferencia de
prensa la noche del viernes en el aeropuerto, antes de partir.
Se quedan dos personas de su equipo para el seguimiento en
el interior” del país de la crisis en hospitales, escuelas, entre otros, dijo
Guaidó a reporteros luego de reunirse con la Alta Comisionada en la sede del
Parlamento, del que es jefe.
Después, Bachelet tuvo un encuentro en la sede de la
Cancillería de Venezuela con el presidente de la oficialista Asamblea Nacional
Constituyente, Diosdado Cabello, el segundo hombre fuerte del gobierno. No hubo
detalles.
Un equipo técnico de Bachelet ya estuvo en el país en marzo,
pero que dos de sus delegados permanezcan en el país abre la posibilidad de que
eventualmente se negocie la instalación de una oficina permanente, de acuerdo
con activistas de derechos humanos que se encontraron el jueves con la alta
funcionaria.
El 20 de marzo, Michelle Bachelet pidió al Gobierno de
Venezuela que garantizara a los expertos de su oficina el acceso a los lugares
y personas que elijan, sin represalias contra los entrevistados.
Un equipo técnico de mi Oficina se encuentra actualmente en
el país y considero que ésta es una primera medida positiva”, destacó Bachelet
en una intervención ante el Consejo de Derechos Humanos de Ginebra, donde
señaló que “es esencial que el equipo tenga acceso total y sin restricciones”.
Guaidó, quien en enero invocó la Constitución para
proclamarse presidente interino argumentando que la reelección de Maduro en
mayo del 2018 fue un fraude, dijo que tanto la presencia de Bachelet en el país
como que deje a miembros de su equipo son un nuevo reconocimiento a la crisis
de Venezuela.